Mission Local está publicando un artículo diario sobre la campaña para cada una(o) de la/los principales contendientes por la alcaldía. Se está alternando a la/los candidatos semanalmente, esta dinámica se mantendrá hasta noviembre. Esta semana le corresponde a: Ahsha Safaí. Lea los artículos anteriores aquí.
La batalla ya había comenzado antes de que el público entrara al auditorio de la Facultad de Derecho de la Universidad de California: Las y los simpatizantes de la y los candidatos a la alcaldía ocupaban las cuatro esquinas de la intersección de las calles Hyde y McAllister cerca las 6 de la tarde, sosteniendo pancartas y coreando consignas.
Había colores de todo tipo: amarillo para London Breed, verde azulado para Aaron Peskin, naranja para Mark Farrell y diferentes tonos de azul para Daniel Lurie y Ahsha Safaí.
Las y los partidarios de Lurie eran los más ruidosos, mientras que los de Peskin sostenían un cartel cómicamente gigante y utilizaban una tabla de planchar como escritorio provisional para los materiales. Los coches pasaban por la concurrida intersección y tocaban el claxon en señal de apoyo, pero nadie podía saber a favor de quién.
Más de 400 personas asistieron el lunes por la noche al debate del Partido Demócrata de San Francisco por la alcaldía, y muchas más lo siguieron por internet. El debate estuvo moderado por Terisa Estacio, periodista de KRON4, en el debate participaron los cinco principales candidatos que, hace menos de una semana, se habían enfrentado en su primer debate por la alcaldía.
Sin embargo, en esta ocasión, cada candidato podía interrogar a sus oponentes, y cada uno disponía de 90 segundos para responder.
Quién importaba era a quién le hicieran, la pregunta. Podía indicar a quién veían como un oponente más fuerte, o podía ser una señal de amistad y revelar posibles alianzas en la votación por orden de preferencia. Parecía que Farrell podría estar cortejando los votos de segunda opción de Safaí.
Lurie, fundador de una organización sin fines de lucro y heredero de la fortuna de Levi Strauss, fue interrogado dos veces por Safaí y Peskin. Farrell, banquero de inversiones que figura como propietario de una pequeña empresa en la boleta electoral; Safaí, supervisor; y Breed, la candidata en funciones, fueron interrogados una vez cada uno. Nadie le hizo preguntas a Pekin.
La pregunta de Safaí a Lurie pareció más bien una declaración: Destacó, una vez más, la donación de un millón de dólares de la madre de Lurie para apoyar la candidatura de su hijo, y añadió que su propia madre solo le dió $150 dólares.
“Es la mayor contribución de la historia de la ciudad”, dijo Safaí. “Mucha gente lo critica y cree que estás intentando comprar la alcaldía. ¿Cuál es su respuesta?”.
Lurie, anticipándose a la indagación, pidió a los votantes que tuvieran en cuenta cómo fue criado, pero también las decisiones que tomó con su vida, es decir, iniciar su organización sin fines de lucro para personas sin hogar Tipping Point, y trabajar para traer el Super Bowl al Área de la Bahía en 2016. También destacó la inversión de su familia en diferentes organizaciones sin fines de lucro: $12 millones de dólares solo en 2024 centrados en la primera infancia, las artes y los parques.
La pregunta de Peskin a Lurie, por otro lado, se centró en dos medidas electorales del pasado: la Prop. C en 2018, la medida que impuso un impuesto a las empresas que ganan más de $50 millones para financiar servicios y viviendas para personas sin hogar, y la Prop. I en 2020, la medida para aumentar la tasa del impuesto de transferencia a los vendedores de propiedades valoradas en $10 millones o más.
Preguntó si Lurie apoyaba estas medidas y, específicamente, la Proposición I, si se comprometería a gastar los fondos en viviendas asequibles, algo que Breed no ha hecho. Peskin también preguntó si Lurie trabajaría para revertirlas como alcalde.
A Lurie se le acabó el tiempo antes de entrar en detalles sobre la Proposición I, pero dijo que se mantiene neutral sobre la Proposición C como director ejecutivo de una organización sin fines de lucro. También aprovechó la oportunidad para enfatizar que, tras la aprobación de la Proposición C, su organización ayudó a “ponerla en marcha”, y reiteró su historial de construir viviendas permanentes “a tiempo, por debajo del presupuesto y con mano de obra sindical bien pagada.”
Lurie, a su vez, pidió a Breed que nombrara tres organizaciones sin fines de lucro que había recortado porque no estaban funcionando bien. Breed insistió en que no quería “tirar a estas organizaciones debajo del autobús”, pero aludió a algunas, entre ellas el Consejo Unido de Servicios Humanos de Bayview, acusado de mala gestión de fondos.
Cuando las organizaciones “cometen grandes errores”, añadió Breed, no es fácil “alejarse” cuando tienen funcionarios a cargo de los servicios.
La pregunta de Breed, aunque de naturaleza más desenfadada, no fue menos combativa. Durante el debate inaugural de la alcaldía la semana pasada, Farrell no pudo nombrar a su drag queen favorito en la ciudad, y Breed dijo que su pregunta era para dar Farrell la oportunidad de redimirse.
“Nombra a tres asesores LGBTQ de tu campaña y a tres drag queens”, preguntó Breed.
Farrell desvió el tema y utilizó la pregunta para destacar su legislación de 2012 como supervisor para reembolsar a las parejas del mismo sexo los impuestos deducidos por sus prestaciones sanitarias. Según dijo, se trataba de una ley presentada antes de que se legalizara el matrimonio entre personas del mismo sexo.
La pregunta de Farrell a Safaí, en cambio, parecía una rama de olivo. Pidió a Safaí que compartiera más información sobre su plan de fondos de condonación de préstamos para primeros respondientes, como enfermeras con diploma, bomberos y operadores del 911. La iniciativa, que se presentará en la reunión de la Junta de Supervisores del martes, pagará los préstamos estudiantiles pendientes y los gastos educativos relacionados con el trabajo hasta un máximo de $25,000 dólares, siempre que las personas trabajen para la ciudad durante al menos tres años.
“Esto no solo mejorará, sino que retendrá a nuestros primeros respondientes”, dijo Safaí.
Esta es la segunda propuesta de Safaí para las elecciones de noviembre. La anterior, presentada el mes pasado, tiene como objetivo permitir a las enfermeras permanentes de tiempo completo a recuperar el tiempo que han trabajado como enfermeras por días, para obtener créditos de pensión.
Safaí ha ido al final en las últimas encuestas realizadas por el San Francisco Chronicle, la organización política moderada GrowSF y la campaña de Mark Farrell. En un momento del debate de la semana pasada, tuvo que recordar al moderador que no había respondido a la pregunta. Pero cree que se ha beneficiado de los debates y que ha aumentado su prestigio entre los demás aspirantes. Anoche se comportó como si no tuviera nada que perder.
“Nuestro obstáculo es conseguir que mi nombre sea reconocido”, dijo. “Después del debate, más personas saben de mí”.
También fue una agradable sorpresa para él escuchar que tanto Farrell como Peskin, dos candidatos “bastante alejados en muchos temas”, dicen que potencialmente le elegirían a él cuando se les preguntó en el primer debate por quién votarían entre los cinco candidatos.
“Son personas que conocen muy bien a Ahsha”, dijo Derek Jansen, asesor de la campaña de Safaí. “Dice mucho… que digan cosas tan positivas de él”.
